Recubrimientos: planificar bien su colocación
A la hora de plantearse una idea en decoración e interiorismo, haciendo reformas en Granada o mediante la realización de una obra nueva en Granada, es muy interesante tanto conocer los diferentes tipos de recubrimientos para paredes como planear adecuadamente su colocación.
Entre los diferentes tipos de recubrimientos, podemos encontrar los paneles más sencillos, con rebordes simples, que se colocan entre el zócalo y el guardasillas, los compuestos y los más completos paneles en relieve.
Lo que sí tienen en común todos ellos es la metodología a la hora de planificar su instalación. Por ello es necesaria la creación de un diseño de acuerdo con la estancia, con la ayuda de un plano a escala o marcando en la pared con una tiza fácilmente borrable.
Para ello, en primer lugar situaremos la altura del guardasillas, que como norma general suele ubicarse a una altura que puede variar entre 76 y 106 cm del piso.
A continuación hay que situar la ubicación de los montantes y travesaños. Los primeros deben tener un tamaño de dos tercios del ancho del zócalo y siempre proporcionados respecto al resto de elementos decorativos. En cuanto a los montantes, es imprescindible situar uno al final, que será el que se encuentre con el contramarco de puertas o ventanas.
Posteriormente, tras establecer un patrón para toda la estancia, se añaden los montantes intermedios, encargados de crear los marcos para los paneles, que deben ser de dimensiones semejantes y estar distribuidos con una misma orientación.
En caso de no poder dividirse una pared en paneles iguales, hay que compensar la diferencia en los paneles extremos. Del mismo modo, hay que mantener la coherencia de todas las esquinas, de forma que sean iguales en toda la estancia.
Por último, en caso de que los paneles sean más estrechos que los contramarcos de puertas o ventanas, hay que empalmarlos contra los bordes decorativos.
